Axel Kicillof celebró un 25 de Mayo sin grietas, con un padre nuestro en arameo y rezos de la comunidad judía
El gobernador llamó a la «unidad» al encabezar el acto por el 211° aniversario de la Revolución de Mayo. Estuvo acompañado por el Monseñor Víctor Manuel Fernández, y el arzobispo de la Iglesia Siriana Ortodoxa de Antioquía, Obispo Crisóstomo Juan Gasalli, y el líder de la Comunidad Judía, Agustín Marcoff. En la ceremonia también participaron intendentes de Juntos por el Cambio y del Frente de Todos.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, encabezó esta mañana un acto en el jardín de la Casa de Gobierno, por el 211° aniversario de la Revolución de Mayo. Durante la celebración, el mandatario estuvo acompañado del intendente de Juntos por el Cambio en La Plata, Julio Garro, y los del Frente de Todos Mario Secco, de Ensenada y Fabián Cagliardi, de Berisso.
También participaron el arzobispo de La Plata, Monseñor Víctor Manuel Fernández, y el arzobispo de la Iglesia Siriana Ortodoxa de Antioquía, Obispo Crisóstomo Juan Gasalli, y el líder de la Comunidad Judía, Agustín Marcoff. Durante el acto, que comenzó pasadas las 10, se izó la bandera, se cantó el Himno nacional, y se llevó adelante una bendición a cargo de los líderes religiosos.
El arzobispo de la ciudad fue el encargado de bendecir la conmemoración del día patrio, y luego el Obispo de la Iglesia Ortodoxa de Antioquia, bendijeron el 25 de mayo en arameo, rezando el «Padre nuestro». Más tarde hubo tiempo para que Agustín Marcoff dijera unas palabras y rezara en representación de la comunidad judía en la Provincia.
Durante su discruso, Kicillof sostuvo que durante la Revolución de Mayo «se necesitó muchísima fortaleza y muchísima tolerancia», remarcando que es «un buen momento para resaltar la diversidad de la provincia de Buenos Aires». Y continuó: «Estamos recordando una revolcuión, una gesta patriotica de nuestra Patria. Esta fecha nos debería acercar a muchísimas reflexiones».
En ese contexto, el mandatario bonaerense llamó a «reflexionar sobre esas enormes batallas que tuvo nuestro pueblo». Y mencionó una comparación con el coronavirus: «Hoy, salvando las distancias, -ya que se usan muchísimas metáforas de guerra a la hora de hablar de la pandemia-, estamos en una lucha totalmente inesperada y muy dolorosa para la humanidad entera».
Haciendo hincapié en la lucha contra la pandemia en territorio bonaerense, Kicillof añadió: «Un pueblo entero se unió para dar estos combates. Los elementos claves fueron la unidad. No hubiera sido posible con el individualismo y el sálvese quien pueda. La gran enseñanza que nos va a dejar la pandemia es que lo mejor es lo colectivo y no lo egoísta».
En otro tramo de su alocución, JKicillof hizo recordar un viejo discurso de Macri: «Hubo angustia por separarse de que en ese momento era entendido como invasor, como el que dominaba. Esto no nos hace estar hoy en conflicto con un pueblo hermano como es España. La angustia la provocaba la dependencia. Recordar nuestra historia para ser mejores y no volver a cometer equivocaciones».
Más tarde llegó el momento de apuntar contra la prensa: «Los medios de comunicación bombardean con postales que muestran y recalcan cada hecho de incumplimiento de irresponsabilidady de insensatez. Pero lo que no muestran en esta pandemia son los enormes gestos de generosidad, de entrega y verdadero sacrifio», lamentó el mandatario.
Finalmente, expresó: «Hoy en el aniversario de la Revolución de Mayo, convoco al pueblo de la provincia de Buenos Aires a pesar de todo lo que se presenta en contra. Dejar de lado el individualismo y el egoísmo. Y cerró: «Hoy celebramos de nuevo nuestro Día de la Patria, asi que a los bonaerenses y a las bonaerenses, ¡viva la Patria!».
